lunes, 17 de septiembre de 2007

El extraño caso de los cables perdidos...



Después de 7 años de andar tocando, (En Febrero cumplimos 8 añotes; uy, que emoción. Sí. Yupi.), uno va entendiendo que todo este pedo hediondo del rocanrol es como una jungla donde tienes que andar al tiro si no quieres salir bailando con algo (puede ser tu morra, tu lira, o alguna cosa peor). En esta ocasión, nos ganaron con los cables.
La tocada fue en el Gorilaz, un bar donde ya habíamos tocado dos veces, y pues en esta ocasión tocaría una banda de Piedras Negras Coah. que se llama Tu Mama (¡ja!), además de Transistor, Noctámbulo, Zona de violencia y Estorbo (sus servilletas).
Pues para no hacer el pinche cuento largo, para cuando tocamos nosotros, que fue en el cierre de tan magno evento, !Ya no habia un puto cable! ¿Pos que chingaos? ¡Si nosotros llevamos un chingazo de cables mordisqueados, con el enchufe chueco, de esos que dan toques, pero que jalan! Total, que la Huicha ( un camarada) nos consiguió unos cables prestados con los Zona de violencia y así pudimos tocar.
Como ya es común desde hace tiempo, tocamos sin la alineación oficial; en esta ocasión, aparte del Rojo (el bataco, que esta siendo cubierto por Juanito) fue el Tako (bajista) el que falto; el motivo fue que como ya trabaja en una fábrica, ahora anda en turnos y pues se quedo a doblar turno. Así que el bajo estuvo a cargo de Ray (otro camarada); se oyó shido, aunque el pinche amplificador del bajo era una bocina toda madreada que casi ni amplificaba.
Se bailo slam, desafinamos, grite pendejadas, me acomodaron un buen chingazo en la jeta con el micrófono (¡ah! por que no hay tarima ni nada, tocamos al ras de suelo, y así pues aunque no quieras te meten al slam con toda la bandera, jajaja ¡se pone muy bueno!), Al Ray casi lo tumban arriba de la batería, y pues terminamos bañados en sudor y en cerveza, lo cual siempre es una buena señal de que fue un buen tokin.
El pedo fue que al ultimo me dio el bajón por una situación muy culera por la que esta pasando un amigo, aparte de que todavía no me recupero del fallecimiento de otro gran carnal (del cual hablare en su momento) y pues que me agarro cante y cante yo solo como pendejo, puras canciones tristes. El wey del bar se me acerco a decirme muy amablemente que ya me callara el hocico, por que si caía la tira le podían poner una multota por no respetar la hora de cierre.
Total que aguantándome las ganas de chillar, apague el ampli, desconecte la lira y me salí, mientras podía escuchar las burlas y los gritos agresivos de unas viejas borrachas a mis espaldas.
Después la misma pinche joda de siempre; recoger las cosas, treparlas a la camioneta, llevarlas a la casa del Trusko (nuestro trompetista), descargarlas y tomar alcohol (bueno, esto ultimo no es una joda).
Y por un momento recordé aquellas primeras tocadas, cuando ni teníamos instrumentos y regresábamos caminando después del recital. Tenían su encanto. Al menos no te preocupabas por el equipo, incluyendo cables.
Lo que me recuerda el motivo principal de este escrito: decirle atentamente a quien se haya volado nuestros cables,

¡Que se vaya a chingar a su madre y se meta los cables por el orificio anal, entiéndase, la coliflor!


Y sí; ando malhumorado.

1 comentario:

LA HUICHA dijo...

Guey...... es anoche la vdd la vdd

te pasaste de lanza pero nell como

te dije,yo no tenia toda la

responsabildad...pero ya tira a

lucas loko!!!!!

por aka andaremos dejando toda

clase de lokeras vdd trusko ja ja